En nuestra consulta de psicoterapia en Granollers hemos tenido la oportunidad de acompañar a varias personas que padecen trastorno límite de la personalidad, también conocido como TLP o trastorno borderline. La sintomatología es bastante amplia, pero, en líneas generales, puede entenderse como una sensibilidad emocional extrema que impide al paciente tener una vida normal. No obstante, existen otros rasgos relevantes que veremos en el post de hoy.
Es habitual en estas personas tener una percepción alterada de la realidad, que hace que tomen conductas radicales. La escala del bien y del mal, para ellos, solo consiste en dos polos cuyos extremos nunca se tocan. De este modo, son prácticamente incapaces de desarrollar y mantener relaciones interpersonales estables y sanas, por lo que, muchas veces, tienden a permanecer en una soledad que, al mismo tiempo, les resulta insoportable. Así, la idea del abandono les produce un miedo irracional, aunque los motivos de este desarraigo sean totalmente comprensibles y se trate de una despedida temporal.
Otra característica del paciente con TLP, que, además de figurar en los manuales de psicología, hemos podido constatar empíricamente en nuestra consulta de psicoterapia en Granollers, es la tendencia a abusar de estupefacientes y llevar un estilo de vida promiscuo o mantener cualquier otra clase de conducta compulsiva. La razón, muchas veces, subyace en la necesidad de llenar el vacío interior que su condición les produce. Aunque las causas se desconocen, se ha encontrado correlación entre su presencia y un pasado marcado por conflictos familiares y abusos físicos, emocionales o sexuales. O con haber padecido abandono en la infancia por parte de sus padres.
Cabe destacar que el remedio más efectivo contra el trastorno borderline es la medicación, aunque, desde la consulta de José Mª Piera Lleonart, te recomendamos acompañarla de terapias enfocadas a una recuperación a largo plazo.